El miedo al estigma y la discriminación tiene un efecto devastador sobre las personas que viven con enfermedades mentales y en sus familias. Los adultos no son los únicos afectados. Los niños y adolescentes luchan con enfermedades mentales también.
El estigma de la salud mental se puede dividir en dos tipos distintos: el estigma social se caracteriza por actitudes negativas y comportamientos de discriminación dirigida hacia las personas con problemas de salud mental como consecuencia de la clasificación psiquiátrica que se les ha dado. Por el contrario, el estigma percibido o auto-estigma es la interiorización de parte de la víctima de salud mental sobre sus percepciones de discriminación y el estigma percibido que puede afectar significativamente los sentimientos de vergüenza y conducir a que los resultados del tratamiento sean más pobres.
Tú puedes hacer la diferencia.
Tu puede ayudar a cambiar la forma en que la gente percibe la enfermedad mental.
En cualquier año determinado, se estima que el 26.2 por ciento de los estadounidenses mayores de 18 años - aproximadamente uno de cada cuatro adultos - sufren de un trastorno mental diagnosticable. Además, los trastornos mentales son la causa principal de discapacidad en los E.U. y Canadá. Muchas personas sufren de más de un trastorno mental en un momento dado.