El síndrome de vómitos cíclicos (CVS, por sus siglas en inglés) es un trastorno caracterizado por episodios recurrentes e inexplicables de náuseas y vómitos intensos.
Estos pueden durar desde varias horas hasta incluso días y son seguidos por períodos sin síntomas. Cada episodio o “ataque” puede ser similar — comenzando a la misma hora del día e incluso durando la misma cantidad de tiempo — y el sello distintivo del trastorno es la presencia de “días libres” sin síntomas.
Visto tradicionalmente más comúnmente en niños, estamos viendo un aumento significativo en adultos que presentan síntomas de este trastorno.
Si bien es difícil de diagnosticar, ya que a veces puede simular otros trastornos de la motilidad, una revisión del historial y un examen cuidadoso son esenciales para acortar el tiempo hasta el diagnóstico y, en última instancia, la terapia. A menudo podemos identificar desencadenantes sutiles y ayudar con medicamentos y estrategias.
Síntomas
Los síntomas más comunes del CVS incluyen:
- Episodios recurrentes de vómitos y arcadas, que a veces van precedidas de náuseas significativas, dolor abdominal o sudoración.
- Períodos entre episodios sin síntomas y salud “normal” en general.
- Los pacientes también pueden tener diarrea, mareos, dolores de cabeza o molestias con luces brillantes o sonidos fuertes.
Causas
El CVS aún no se comprende completamente ya que las causas subyacentes siguen siendo desconocidas. Puede haber un componente genético, hormonal o neurológico. También puede haber superposición con otros trastornos digestivos.
Algunos posibles desencadenantes incluyen agotamiento físico, deshidratación (que puede empeorar con ataques de vómitos), mucho estrés o ansiedad, sobrecalentamiento y ciertos alimentos/bebidas o alérgenos ambientales.
Prevención
Evitar los posibles desencadenantes — una vez descubiertos — puede ser muy útil para reducir la frecuencia de los episodios. También hay ciertos medicamentos que empleamos para reducir el "desequilibrio químico" que se cree que juega un papel en este síndrome. Los cambios en tu estilo de vida pueden ser igualmente importantes con énfasis en el sueño adecuado, la hidratación y el manejo del estrés.
Complicaciones
Las complicaciones del CVS se relacionan principalmente con los episodios de vómitos. Estos incluyen la irritación del revestimiento del esófago por el ácido del estómago y la interrupción de las arcadas a veces violentas. La deshidratación puede volverse bastante severa e incluso provocar algún grado de insuficiencia renal, presión arterial baja, mareos e incluso síncope (desmayo). También se puede observar erosión dental por el ácido estomacal, particularmente cuando los ataques son frecuentes. Para obtener más información, por favor haz clic en el enlace de más abajo.
Consultas
Si tienes signos o síntomas que sugieran CVS, comunícate con tu médico o con el Neurogastroenterology and Motility Center al 475.210.4727 para una consulta.
Aprende Más
En la Web: