La osteoporosis es una enfermedad debilitante que afecta a miles de mujeres. Con el tiempo, los huesos se vuelven frágiles y es más probable que se rompan.
Con mayor frecuencia, la enfermedad afecta a mujeres mayores, muchas de las cuales pierden hasta el 20 por ciento de su masa ósea total en los primeros cinco a siete años posteriores a la menopausia.
Una prueba y un examen de densidad ósea son la manera de saber si tienes osteoporosis. El examen de densidad ósea es rápido, indoloro y no invasivo. La prueba de densidad ósea busca una densidad ósea baja, que es un factor de riesgo importante para las fracturas óseas. Con base en los resultados de las pruebas y otros factores, tu obstetra/ginecólogo puede estimar la probabilidad de que tengas una fractura ósea debilitante.
El Charlotte Hungerford Hospital a través de su afiliado, Advanced Medical Imaging, ofrece pruebas DXA (absorciometría de rayos X de energía dual), considerada la prueba "estándar de oro". La DXA puede diagnosticar la osteoporosis con una exposición mínima a la radiación y un tiempo de exploración rápido. El procedimiento de prueba de densidad ósea utiliza una dosis de rayos X muy baja — menos de una décima parte de una radiografía de tórax para evaluar los niveles de densidad ósea de un paciente.
El hecho más importante es que las pruebas de densidad ósea pueden proporcionar una detección temprana, lo que puede prevenir la pérdida ósea excesiva a través del tratamiento y, por lo tanto, evitar que se produzcan fracturas.