El estreñimiento no es una condición poco común y puede afectar a personas que siguen dietas bajas en fibra, toman ciertos medicamentos o padecen enfermedades como el Parkinson, la esclerosis múltiple o el hipertiroidismo. Sin embargo, si experimentas estreñimiento de forma regular o interfiere con tus actividades normales, es importante hablar con tu proveedor de salud para recibir tratamiento y evitar complicaciones.
Síntomas y Diagnóstico
El estreñimiento se refiere a la dificultad para evacuar. Los síntomas relacionados incluyen:
- Tener tres o menos evacuaciones por semana.
- Esforzarse para evacuar.
- Presencia de sangre en las heces o heces negras.
- Evacuar heces duras, secas o con forma de grumos.
- Sensación de obstrucción en el recto o de evacuación incompleta.
La condición se considera crónica si los síntomas persisten por más de tres meses. Varios factores de riesgo pueden aumentar las probabilidades de estreñimiento crónico, entre ellos:
- Ser mujer.
- Tener una edad avanzada.
- Padecer trastornos de salud mental como la depresión.
Para diagnosticar el estreñimiento, nuestros especialistas realizan un examen médico completo y hacen preguntas clave sobre tu estilo de vida, dieta y salud general. En muchos casos, la causa puede identificarse en esa evaluación. En otros, descubrir el motivo del estreñimiento puede requerir pruebas adicionales.
Sin tratamiento, pueden surgir complicaciones como:
- Hemorroides
- Impactación fecal, cuando las heces duras se acumulan en el colon.
- Fisuras anales o desgarros en el tejido del ano.
- Prolapso rectal, cuando los músculos del suelo pélvico se debilitan y el tejido del recto se desliza fuera del ano, causando molestias.
Opciones de Tratamiento
Los planes de tratamiento para el estreñimiento crónico varían según la causa y otras consideraciones específicas del paciente. Se recomiendan cambios en el estilo de vida como:
- Aumentar la ingesta de fibra mediante alimentos ricos en fibra o suplementos. La fibra ayuda a retener agua en las heces y facilita su evacuación.
- Hacer más ejercicio.
- Incrementar el consumo de líquidos.
- Cambiar medicamentos que causen estreñimiento.
- Tomar laxantes o ablandadores de heces.
- Probar la biorretroalimentación (conocido como biofeedback en inglés) para reentrenar los músculos del suelo pélvico a relajarse y empujar cuando sea necesario.
Vivir con la Condición
Trabajamos con cada paciente en estrategias personalizadas, que incluyen cambios en el estilo de vida o medicamentos, para prevenir o aliviar el estreñimiento.